Bodegones para el alma.
Sobre este momento cósmico - humano, sobre estas fechas:
Preparemos el ajuar, cuerpo, hogar con el alimento medicina, los baños de alquimia, la ternura nutricia que conforta cualquier "sed" de AMOR.
Rumbo a la luna nueva en el signo de Cáncer (20 de junio del 2020) y hacia el eclipse solar de este solsticio (21 de junio del 2020), el hogar de la infancia en tu corazón y cualquier huella o impronta de separación, de amor condicionado, de deseo ambivalente en la acogida del niño-niña que fuiste, busca ser sanado.
Ir adentro como el cangrejo, para renovarse y protegerse en consciencia, no para defenderse del fantasma de la vulnerabilidad oculto en el inconsciente, sino para abrazar esa vulnerabilidad que nos hace humanos, esa sensibilidad reveladora en todos.
Haz de ti un hogar preciado, abrazate y nútrete con dulzura. Que el exoesqueleto del miedo no límite la expresión fluida del vínculo, en la aventura de amar y ser amados. Que la luna, símbolo de lo materno, te recuerde el gozo de verte crecer como una semilla, hijo, hija de la VIDA.
En este tiempo, diferencia en tu comunicación, la defensividad extrema de una sana defensa.
Apoyada en la información de la astróloga védica, Yllara Bettina Musch, es recomendable el uso del cuarzo rosa, el ópalo rosado, la selenita, la piedra luna, cuarzo cristal y obsidiana negra o turmalina negra. Usa el más importante de todos, el cristal de armonía que es tu propio centro cordial, tu corazón.
Por: Ana Lucia Acosta Bedoya
Maestra y Terapeuta Reiki
@unpuentereiki
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